Si no hay un nuevo Gobierno desde el 20 de diciembre, el único responsable es Pedro Sánchez, pues si hubiera querido dialogar podría incluso ser vicepresidente de un Ejecutivo encabezado por Mariano Rajoy. Pero han primado el sectarismo y la exclusión, y con sus faroles nos ha hecho perder el tiempo de Navidades a Semana Santa a todos los españoles. Y los faroles son justo lo que no necesita nuestra economía, que se alimenta de la confianza y la certidumbre.
Hoy estamos a un mes para una posible convocatoria de nuevas elecciones generales, un escenario que intentaremos impedir trabajando hasta el último minuto. Rajoy ha vuelvo a tender la mano y su propuesta de diálogo y consenso se mantiene, pues entendemos que España necesita una gran coalición que asegure y refuerce nuestro crecimiento.
Nuestro país ha logrado iniciar la senda de la recuperación, pero sabemos que no ha llegado a todos los españoles y todavía es posible malograrla si se regresa a fórmulas fracasadas. Todos los ciudadanos, en especial los que más han sufrido los rigores de la crisis, se han ganado el derecho a que los beneficios de dicha recuperación también les llegue.
El Partido Popular ha propuesto siempre la única opción viable para afianzar estas mejoras: un Gobierno capaz de afrontar las ambiciosas reformas restantes que cuente con el respaldo de más de 250 diputados constitucionalistas centrados en lo importante. Un Ejecutivo solvente, estable e integrado por personas experimentadas.
No podemos tirar por la borda todo lo que ha avanzado nuestro país, que ha pasado de liderar el desempleo en Europa a crear 1.400 empleos diarios. Estábamos en recesión y hoy crecemos. Aquí no hay milagros, solo el sacrificio de un país que entró en el modelo del euro con muchas dificultades, agravadas con una crisis supranacional nunca reconocida por el anterior Gobierno socialista, que negó que estuviéramos despilfarrando, esquilmando nuestra productividad.
Y ahora parece que Pedro Sánchez quiere volver a los errores del pasado porque no es lo mismo pretender ser el centro que quedarse en medio estorbando. Casi cuando ya ha consumido la mitad del plazo constitucional para la formación de Gobierno sigue manteniendo la misma posición de veto a quién ganó democráticamente las elecciones y no termina de aceptar que la única opción que puede lograr la estabilidad es la Gran Coalición.
De hecho, los cinco pactos enunciados por Mariano Rajoy muestran su compromiso inequívoco por afrontar los problemas importantes: acuerdos en materia institucional, social, educativa, en política fiscal y financiación autonómica, y por el crecimiento y el empleo. En resumen, es en lo importante donde los españoles y el resto de fuerzas políticas podrán siempre encontrar al Partido Popular porque entendemos y tenemos claro que no es momento de campañas de autopromoción, sino de comprometerse por el futuro de España.
Defender un Gobierno de Cristal, consentido por una abstención de Podemos en la investidura, es una gran irresponsabilidad, pues hablamos de un Gobierno débil, frágil e inestable. Y si el PSOE decide irse con Podemos estaríamos ante un Gobierno que daría alas a los separatistas.
Dicen que el movimiento se demuestra andando y nosotros seguiremos estando a la altura que exige la situación, esto es, abogando por una gran coalición de Gobierno, presidida por Mariano Rajoy, unida en los grandes consensos de nuestra democracia y capaz de afrontar desde la fortaleza parlamentaria todas las reformas de futuro que necesita España.
Confío en que durante este mes, el mes de la responsabilidad, podamos hacer un Gobierno como en Alemania, donde gobierna Merkel con los socialdemócratas, como el que hay en Austria, donde gobiernan los socialdemócratas porque ganaron con el PP, y como el que hay en quince países de la Unión Europa.
O como el que hay en las instituciones comunitarias con el socialista alemán Martin Schulz, presidente del Parlamento Europeo, y Jean Claude Juncker, miembro del Partido Popular Social Cristiano y presidente de la Comisión Europea. Personas de ideologías contrarias pero unidas en lo importante.
España y Canarias necesitan esa Gran Coalición y no merecemos ni faroles ni elecciones.
#EspañaEnSerio
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